en la inmensidad de la galaxia
los cuerpos celestes apostaron
por llevar nuestro nombre,
portadores de magia e ilusiones crecientes
en el silencio de la noche
la música la ponía la brisa
rozando nuestros labios prófugos,
carentes de juicio y con prisa
me cuelo en tus sueños
sin permiso,
para contarte que no sé nada
y que todo es lo que siento
nadie me previno del temporal
que acompaña al amerizaje,
cuando vives sin razonar,
cuando amas sencillamente
no quiero vivir del recuerdo
de los restos del amor,
de las nanas que me susurro
pa poder callarme y dormir
quiero volar
y no encuentro las alas
quiero volar
y escribir cosas lindas
quiero volar
y destituir al miedo
quiero volar
y traer sentido a la nada
quiero volar
e inundar el vacío de mi alma
para así tener un motivo
de nadar hasta la orilla más cercana
sin escatimar en alegrías
ni en risas diáfanas