lunes, 29 de julio de 2019

un cabo que desanuda

¿Dónde crecen las flores que no riego?
¿Hacia dónde voy cuando en ti me reflejo?
Me acurruco en tu hombro
y me miro en tu espejo.

Tu fortaleza me agranda y me amansa,
mis pies en las curvas de tu canela.
Me reservo para ahora
compartir Venus en este cielo.

La sutileza del descuido,
por fin me encuentras si te miro,
por fin entiendo lo que digo,
a la par que me obedecen las caricias
que depositaré en tu cabello fino.

La inesperada llegada
de esta tu cálida mirada,
las conexiones más puras
llegan sin ser anunciadas.

Has hallado un oasis
inmerso en este mi desierto,
te reservo mi mejor duna
que jamás tendrá dueño.

Garabateo en mi mente
palabras abandonadas,
mientras en tu vientre encuentro
el lugar perfecto para posar mi calma.

Escondo en mis ojos
el anhelo etéreo
que recorren tus manos
al vuelo por mi laberinto.

No siento dudas
sólo ganas intactas;
¿qué se espera de un nosotros
que no busca supuestos?

Mi luz favorita es aquella
que estamos acogiendo juntas,
obviando la penumbra
que rige y asola a nuestras soledades.

Te propongo un lugar
al que cuando gustes podrás retornar,
el mismo que cuando te vas
hace de la alegría su hogar

ante la tristeza y la sal
de unas olas cargadas de arena
que observamos desde la orilla,
a la par que ellas nos contemplan plenas.



sábado, 22 de junio de 2019

fisión astral

en la inmensidad de la galaxia
los cuerpos celestes apostaron
por llevar nuestro nombre,
portadores de magia e ilusiones crecientes

en el silencio de la noche
la música la ponía la brisa
rozando nuestros labios prófugos,
carentes de juicio y con prisa

me cuelo en tus sueños
sin permiso,
para contarte que no sé nada
y que todo es lo que siento

nadie me previno del temporal
que acompaña al amerizaje,
cuando vives sin razonar,
cuando amas sencillamente

no quiero vivir del recuerdo
de los restos del amor,
de las nanas que me susurro
pa poder callarme y dormir

quiero volar
y no encuentro las alas

quiero volar
y escribir cosas lindas

quiero volar
y destituir al miedo

quiero volar
y traer sentido a la nada

quiero volar
e inundar el vacío de mi alma

para así tener un motivo
de nadar hasta la orilla más cercana
sin escatimar en alegrías
ni en risas diáfanas

lunes, 27 de mayo de 2019

bajo el ocaso

Deshacernos.
      Soñar y llorarlo todo.

El humo del bareto
ameniza mi insomnio.
Insomnio causado
por caos al cuadrado.

Hago camino
habitando en el viaje.
No olvidarme del propósito
de entregarme a la tierra y aire.

"Alejarme de tu lado"
suena tan amargo,
¡imaginen cómo se siente
azotándome en el alma!

De norte a sur
y de sur a norte;
me parece tan ajeno,
lo revivo tan lejano.

Hacernos.
      Soñar y reírlo todo.

No somos nada
mas lo fuimos todo.
Alcanzamos las nubes
sin divisar el lodo.

Bailar bajo el aguacero
no importando el resultado final.
Sin resultar en final,
más bien en fin.

Nos estremecemos ante la idea
de la agria soledad.
No traemos a la conciencia
la compañía transcendental.

Deja,
te quiero amar.
No fuimos nada,
lo somos todo.


miércoles, 24 de abril de 2019

nada. sutil. todo

Despertar en casas foráneas
y mudar de piel
Avivar el fuego que dimana
directo de la escarcha de hiel

Este frío
ya no me pertenece
El invierno,
que más corto esta vez,
se derrite en mis morros

Pasea por mi ser
y sobre todo,
no te demores en mi cuello,
que mi piel es infinita
y mis pechos albergan la vida
que la tuya precisa

Ahogarme en una taza de té
y partir justo antes
del atardecer

Follarnos sin tabúes
y sin disfraz cortés
Soy tan guarra en la cama
como me apetezca hoy ser

Quítame la etiqueta de "señorita"
que me provoca desconcierto
Al hablar de sexo,
mi boca canta
lo que todas piensan

No me lastimes
que sigo en mi burbuja, 
embrujo del amor,
y no encuentro
un final divisable 

Hagamos pues por no sentir
sino el éxtasis que escondes
bajo tu fina almohada

miércoles, 3 de abril de 2019

Anáforas Vol III. El Principito

Me pregunto si cuando miras las estrellas
también me estás mirando a mí.

Por fin he comprendido el
Ojalá te pudieras ver
como mis ojos te ven a ti.

Me pregunto si cuando hablo con la Luna
vos también la escuchas,
si le cuentas tus miedos y anhelos;

       si en ella encuentras refugio dentro de sus poros.

Me pregunto si te preguntas
qué sientes que sientes;

si también te imaginas en la noche como me abrazas,
piel con piel,
buscando la mano que en mi pecho reposa,
saboreando la miel del recorrido que trazas.

Me pregunto si deseas volverme a ver en Septiembre,
si aún tienes que descifrar los secretos
que guardo en mi vientre.

       si tienes la paciencia de la cual nuestro animal huye.

Me pregunto si piensas si fuiste sincero
con vos mismo y conmigo;
si realmente en mí viste reflejada
la Luna de enero.

Me pregunto si piensas que te quiero.

martes, 2 de abril de 2019

Anáforas Vol II. Martes Azul

No sé cómo arrancarme
este anhelo
No sé cómo no
echarte de menos

No sé esperarte
no sé darme tiempo

No sé qué suponer
no sé cómo se rebobina
diciembre

No sé recordar sólo lo bueno,
puesto que todo fue perfecto

No sé frenar este diluvio
que procede de mi centro.

lunes, 1 de abril de 2019

Anáforas Vol I. A Cámara Lenta


No puedo llorar rápido
pues pausado
es tu olvido.

No puedo llorar rápido
porque querría todo
excepto tu olvido.

No puedo llorar rápido
pues lentamente
me descubres tus latidos.

No puedo llorar rápido
porque rápido nos encontramos
cuando en la selva nos perdimos.

No puedo llorar rápido
ya que ágil e intensamente
nos supimos en el mismo camino.

No puedo llorar rápido
pues me hallo sumergida
en mi pasado y en tu sino.

No puedo llorar rápido
porque un apresurado destino
es lo que pido.

No puedo llorar rápido
puesto que el tiempo
es quien dicta el ritmo.

No puedo llorar rápido,
de tal modo que,
paso a paso

               me despido.

martes, 12 de marzo de 2019

Sempiterno

<<Recuérdame que en otra vida sea relojero y ponga a funcionar el minutero marcha atrás, hasta el día que vi tu partida, para decirte a donde vayas que algo en mí se queda, que no se irá.>>


De repente me sentí muy desubicada, desorientada. No comprendía dónde estaba, hacía dónde me dirigía. No entendía porqué estaba manejando una moto. Por qué tenía frío. Por qué volvía a casa. Por qué había vuelto a casa. Por qué no me quedé en el Caribe. Por qué no estaba con vos

Me aterra pensar que tal vez no nos volvamos a ver. Que no fue real, que sólo fuera producto de tu soledad. Que no vuelvas a apretar mi mano cuando estemos caminando, y que no queramos avanzar si no entrelazamos nuestros dedos y sueños. Que no comparta cada cosa que me fascina contigo, o vos tu mirar en mi pupila. Que no te toque el pelo con tanta magia porque esté pensando en tu hermosa cara y debiera disimular. Que no me pidas que te abrace al alba, para poder así acercar mi corazón al tuyo por la espalda. Que no seas el primer olor ni sonrisa cuando mis sentidos despiertan. Que no me vuelvas a besar, ni a susurrarme entre suspiro y sueño "no te vashas".

Que con vos no puedo ni quiero disimular, si ya te he mostrado mi cara más segura pero también la más vulnerable. Cada sonrisa nacía de mi centro y, aunque yo no me podía observar, me imagino mirándote con todo el amor del universo, pues el universo está dentro de mí, y porque ya sabemos la diferencia entre ver y mirar

Al mirarte te veo cristalino; veo tu alma, veo tu corazón. Y el camino se vuelve una mijita más sencillo, casi como caminar sobre la cuerda floja más segura del mundo. Y la luna, que pensativa, observaba como las estrellas nos admiraban y guiñaban un ojo al parpadear. Incluso algunas, y sólo algunas, comenzaban a deslizarse por el cielo a cámara lenta, únicamente para que las pudiésemos así otear y poder pedir el mismo deseo en voz mental. Y el sol implosionaba, a fin de que esos minutos contemplándote fueran lo suficientemente largos para darme cuenta de que contigo, me gustaría hacer de la vida un paseo compartido. A fin de que esos minutos durasen lo efímero de la eternidad que aquella noche en Arrecifes  sin buscarlo atrapamos.

Jamás olvidaré cuando propusiste que me enamorase de mí, que me cuidara, que cultive mi energía vital, tan fácil de hurtar, sin tú ser consciente de la paz que un día me regalaste para conseguir todo ello y todo cuán quisiera. 

Y extraño aquella primera incertidumbre; la de no conocer cuándo nos reencontraríamos, mas la certeza de que ocurriría más pronto que tarde. Ahora, me recreo con tu recuerdo y nuestra conexión espiritual. Sé que estás aquí conmigo, pero a veces se me hace arduo si no te sostengo en mi pecho. Mas sonrío si nos pienso, sabiendo que no fue sólo producto de tu soledad; fue, o es, realauténtico único.

Que el anhelo no me robe aquella paz con la que me topé; que me dé fuerzas para continuar el vuelo.




jueves, 28 de febrero de 2019

Pasanoches


Me quiero tatuar el cielo
y todo el firmamento.

Qué estupidez,
cómo va a caber en mi piel
tu alma
y su desnudez.

Las Tres Marías 
sin cesar brillan;
se quedaron en mi retina
y decidieron que
de mi lado
jamás se moverían.

Hay un cuadrilátero
que las envuelve.
Vos y yo estamos dentro,
perdimos la gravedad.
Ahora es Orión
nuestra sala de estar.

La Estrella Polar 
seduce a mi pupila.
Las constelaciones tiritan,
están deseosas de que las amemos
como ambas nos sabemos amar:
desde el respeto, espacio y libertad.

La Estrella Polar
es la que más brilla.
Ahora está celosa
porque vos la eclipsas.

      Quiero en tu planeta habitar; 
no se me ocurre mejor lugar 
en donde reescribir el porvenir.

domingo, 17 de febrero de 2019

luz

y ahora doy respuesta a tantas malas elecciones;

nena dañada = encuentros dañinos

nena dañada = amor dañino, ergo no era amor

.

nena dañada abre la puerta de la conciencia de sus carencias

nena dañada rechaza la necesidad, para tornarla elección

.

El amor no duele

Amar es abrir los brazos, expandirse y hallar aquella ya-no-tan utópica libertad

;

sábado, 19 de enero de 2019

Nos vemos con la Luna llena


Perdimos la noción del tiempo durante sólo y toda una semana; nuestros destinos cambiaron en el momento en que nos intercambiamos las miradas.


Con sólo su carpa, cualquier lugar cerca de aquel río caribeño nos parecía espectacular para vivir, creando un campamento improvisado bien lejos de Medellín.

Él agradecía al sol por servirle como despertador y guía a lo largo del día. Decidió brindarme el mejor amanecer inimaginable: despertar con su abrazo para continuar con el beso a medio camino de la madrugada, donde caíamos rendidos de amarnos tanto y tan bien. ¿Alguna vez se durmieron entrelazando sus labios con los de otra persona?

Aquello era otra señal que nos mostraba que todo lo que estaba aconteciendo era real. Era increíblemente real.

"Sabes que esto puede ser así toda esta vida, ¿no?"

Si alguna se desvelaba en la noche, se aseguraba que la otra estuviese bien, y nos regalábamos otro lote de caricias para alimentar la paz en que habitábamos. Nunca sabíamos cuánto dormiríamos, ¿y es que acaso eso importaba? Nos amábamos todo el rato, la luna nos acompañaba.

Cuando él me daba el último beso antes de irse a laburar, yo me quedaba alguna hora más dentro de la carpa, para captar así toda su esencia posible, pues no nos volveríamos a ver hasta casi el atardecer.

Dichas horas separados eran necesarias para entender que ansiábamos seguirnos conociendo, explorando, descubriendo nuestras almas.

Yo sabía que él estaría esperándome; él, que yo iba a llegar. Y era hermoso, pues no podíamos comunicarnos sino cuando estábamos juntas. 

Ambas pensábamos "es ella, esa persona existe" y, a pesar de haber compartido una única semana, y tan única, lo sentíamos, eran nuestras energías nomás. Se nos ocurrían ideas disparatadas, como él cambiar el rumbo de su viaje y yo no volver a España, pues como les digo, nuestros destinos ya habían cambiado. Sin embargo, sabíamos que debíamos terminar lo que cada una empezó, no importaba, pues ya éramos eternas.

Ahora, después de unas semanas sin saber el uno del otro, por fin nos encontramos, a distancia, para saber que todo está bien, y que confiemos en la luna para el descuento de los días hacia el reencuentro más hermoso de la historia.

lunes, 7 de enero de 2019

¿qué es la perfección?

La desnudez incomoda. ¿Cómo hemos llegado a tal punto? ¿Cómo hemos llegado a odiar nuestra apariencia física?

Creo que, por primera vez en la vida, me he sentido libre y me he sentido libre amando. Me he visto, por fin me he visto, con ayuda de una mirada. He conectado con la Pachamama de verdad, con el mar Caribe rompiendo a un lado y la selva chillando al otro, conviviendo con esos bichillos y animales tropicales. Se ha esclarecido el camino y, bueno, he descubierto qué es el camino, viajamos hacia el centro, viajamos hacia la vida.

Todo el recorrido te ha llevado a ese punto exacto de tu vida, no es casualidad que estemos donde estamos, es parte del camino. Es comprenderlo. Es apaciguar el dolor. Es confiar en la vida.

Descubrimos, sin buscarlo, qué era la perfección, que es Dios, y Dios no es otra cosa que el momento, el instante en que se casan mente y emociones. Dios somos todas, somos 2 almas que caminan juntas; ahí es cuando sabes que es real, y vos sonríes sin darte cuenta porque no conocías esa emoción, esa cara de la realidad. La perfección es sentir el alma, despojarse de lo material, del cuerpo, que es sólo el atuendo, y que es tan complejo conseguir.

Sentirse sentidx, mandar a la mierda las inseguridades que te han acompañado 22 años y comienzas a entender porqué.

Amar, la perfección es amar todo el rato, a todas, a tu entorno, a la luna y a las estrellas. Amar es cuidarte, cuidar tu energía, que es sagrada, pero que no todas van a saber valorar. Amar es agradecer. Amar es aprender y enseñar, amar es compartir. Por tanto, amar es crecer juntas.

Reconocernos seres emocionales y no sentir miedo a Ser. La perfección es aquí y ahora.




Gracias compañero.